Ricos, dulces, fáciles y divertidos... son ideales y prácticos ya que son golosinas caseras y nos sabemos que contienen no como algunas golosinas del mercado que prácticamente son todas artificiales
para hacerlos necesitamos:
- 500 grs. de azúcar.
- 250 ml de agua.
- 15 grs. gelatina sin sabor.
- 2 cucharaditas de esencia de vainilla.
- 1 pizca de sal.
- Azúcar impalpable para espolvorear.
Asi se prepara
En una olla coloca el azúcar y cubre con la mitad del agua. Lleva a
fuego alto hasta que obtengas almíbar a punto de hilo fuerte (es
cuando tomas un poco de almíbar entre la yema de dos dedos y al
separarlos se forma un hilo que no se rompe). Mientras haces el
almíbar, en un bol bate la gelatina con la vainilla, la sal y el resto
del agua y, cuando el almíbar esté listo, viértelo, sin dejar de
batir, hasta que la preparación esté blanca.
Espolvorea una fuente con azúcar impalpable y pon la preparación en ésta,
empareja y espolvorea con azúcar impalpable. Deja que se enfríe a
temperatura ambiente y corta en cubos o cuadros.
Para dar color a los malvaviscos durante el batido se le añaden gotas
de colorante para repostería.